Voy a explicar la forma de hacer jabón casero tal y como se ha venido
haciendo hasta nuestros días. Ahora no es muy normal que en los hogares
se haga jabón, pero hasta hacia bien poco, nuestros abuelos y tíos,
tenían la "receta" para hacer su propio jabón casero. El hecho que mi
tía Salvadora ya no esté con nosotros, me hizo pensar que cada vez que
veía un jabón casero tradicional, me acordaba de ella y de cómo hacía
jabones en el pueblo.
Pero, ¿Por qué hacer jabón casero?
Primero, porque te lo pasas bien “jugando”, probando y experimentado
descubriendo nuevas cosas. Segundo porque el aceite que sobra en el
hogar y se tira por el fregadero termina en nuestros ríos o depuradoras.
En los ríos crea una película superficial que no permite la difusión de
oxígeno del aire al agua, afectando a la fauna, y en las depuradoras es
muy difícil de depurar biológicamente, y hay que utilizar separadores
de grasas previos al sistema para mejorar el rendimiento. El jabón
casero contamina menos que los jabones comerciales, no causa alergias y
es económico puesto que lo fabricas tu mismo.
Historia
El jabón ya era utilizado desde el año 2.800 a.C De esta época data un
material jabonoso encontrado en unos cilindros de arcilla durante una
excavación arqueológica en la ciudad de Babilonia. En estos cilindros
había unas tallas que describían el proceso de hervir las grasas con
ceniza, método ancestral de fabricación de jabón.
¿Cómo se produce el jabón?
ÁCIDOS GRASOS + SOLUCIÓN ALCALINA = JABÓN + GLICERINA
ACEITE + SOSA = JABÓN + GLICERINA
INGREDIENTES:
INGREDIENTES BÁSICOS:
- AGUA
- ACEITE
- SOSA
INGREDIENTES OPCIONALES
- SAL
- ALOE VERA
- LAVANDA
LA SOSA:
La Sosa es imprescindible para que se produzca esa reacción, pero hay
que tener en cuenta que por sí solo es un elemento cáustico muy
peligroso, cuyo manejo implica tomar una serie de precauciones muy
importantes para manipularlo con seguridad.
Se necesita conocer también una serie de tablas con parámetros y
proporciones muy concretas de cada uno de los elementos que constituyen
la reacción, así como su correcta formulación.
El conjunto de dichas tablas imprescindibles para la elaborar cualquier
tipo de jabón, es lo que se conoce como tablas de saponificación, pero
para nuestro caso que utilizamos aceite usado de oliva o girasol hay que
utilizar 134 gramos de sosa por cada kilo de aceite.
EL AGUA:
Yo he utilizado agua osmotizada que produzco gracias a la ósmosis
inversa de Hidro-Water, S.L. que tengo en mi casa, pero para los que no
tengan, el agua de lluvia es la mejor que podemos usar.
Las aguas duras no son apropiadas para hacer un buen jabón.
Si el agua es de la red pública y está tratada, hay que dejarla reposar de un día para otro para que se evapore el cloro.
En cuanto al agua la proporción debe ser mínimo del 38 por ciento del peso del aceite.
ACEITE:
Se puede realizar con cualquier tipo de aceite, e incluso con manteca de
animales con el único requisito que no esté rancio. Pero como lo que
nos preocupa es el reciclaje, que mejor que utilizar el aceite de oliva y
girasol usado en las cocinas previamente filtrado para realizar este
experimento. Os puedo asegurar que el olor a fritanga no se va a
transmitir al jabón casero.
SAL:
Os podéis preguntar ¿sal? Si porque la sal mejora la textura del jabón.
Esto se realiza para que la mezcla cuaje de forma completa de tal forma
que se separa de manera completa y flota sobre la glicerina. Este paso
se le suele denominar SANGRADO o SALADO del Jabón.
ALOE:
¿Qué decir de las propiedades de la Aloe Vera que ya no se sepan?. Las propiedades más significantes para la piel son:
- Protege y regenera la dermis, ejerciendo sobre la piel una profunda acción bactericida, humectante y de limpieza.
- Funciones antisépticas y cicatrizantes, ya que con sus nutrientes naturales ayudan a la regeneración de las células de todas las capas de la piel.
- Hidrata en profundidad y es muy útil en pieles sensibles y estropeadas.
- La cantidad a utilizar es de un 5%-10% de la cantidad de Jabón que se va a crear.
LAVANDA:
En mi experimento, puse a macerar la lavanda en el aceite usado. La
verdad es que el aroma del aceite cambió totalmente y olía muy bien,
lástima que después de realizar el jabón el aroma casi ha desaparecido.
Para darle un aroma al jabón casero hay que añadir las esencias cuando
la temperatura haya bajado de los 40ºC. Pueden utilizarse las que se
utilizar para perfumar las casas.
UTENSILIOS
- Ollas
- Palangana
- Elemento para remover (plástico o madera)
- Guantes de látex de protección
- Gafas de sol de protección
- Recipientes o moldes para el jabón
Ingredientes de Jabón casero con Aloe vera
Aunque anteriormente digo las proporciones correctas, para este experimento y de forma sencilla he utilizado:
- 1 litro de aceite con lavanda macerada
- 1 litro de agua osmotizada
- 1/6 de sosa
- 60 gramos de Aloe Vera
- Un puñadito de sal
Procedimiento
- Guardar el aceite usado hasta juntar 1 litro y poner flores de lavanda o espliego a macerar con el aceite.
- Calentar en una olla 1 litro de agua y en otra el aceite filtrado con un colador a 40-45ºC. (Ojo, la reacción ya por sí es exotérmica y no es necesario, yo lo digo conforme se hacía)
- Transvasar el agua caliente a la palangana con cuidado de no quemarse.
- Este paso es el más delicado. Hay que disolver la sosa en el agua, para ello con cuidado y sin salpicar echar la sosa sobre el agua. Esta es una reacción exotérmica y libera calor. Al instante se eleva la temperatura y se liberan durante un par de minutos gases que resultan muy irritantes. Por ello, es imprescindible protegerse ojos y piel y utilizar guantes, mascarilla y realizar la operación en un lugar bien ventilado o al aire libre. Se remueve hasta que la sosa se disuelve completamente.
- Echar el puñadito de sal y disolver
- Ahora se va añadiendo el aceite poco a poco, mientras con un palo se va moviendo la mezcla. Este proceso debemos prolongarlo durante un buen rato, una hora aproximadamente, hasta que tengamos una pasta espesa de color blanquecino. Es muy importante no dejar de remover ni un segundo y siempre en el mismo sentido mientras la mezcla se va espesando y hasta que el jabón está hecho. De todas formas esta operación se puede acelerar con una batidora, pero si se hace de forma lenta, la glicerina que se forma de la reacción queda embebida en el jabón lo cual le dará mayor suavidad y mejor textura.
- Del Aloe Vera hay que poner la parte carnosa del interior de las hojas y batirlo. Durante el proceso de mezcla, se añade el Aloe Vera que previamente hemos batido.
- Es aquí, en este punto, cuando la temperatura es menor a 40ºC, cuando si realmente queremos perfumar el jabón, hay que añadir los aceites esenciales. En el último momento, antes de repartir en los moldes se pueden añadir al jabón flores secas o hierbas aromáticas secas, la cantidad y el tipo dependerá de los gustos de cada uno. También se pueden agregar colorantes.
- La cantidad de material extra que se puede añadir a la receta será de un 5% como máximo de la cantidad de aceite utilizado.
- Siempre añadirlos justo antes de poner el jabón en el molde o después de que está curado, fundiéndolo al baño maria.
- Aromatizante; sándalo, flores secas aromáticas, aceites esenciales, especias como anís, vainilla etc.
- Suavizante; Avena remojada, arcilla en polvo
- Decorativo; Trozos de jabones. Colorantes como cacao, curcuma, Nutritivo; Aceite de germen de trigo, aceite de aguacate,
- Exfoliante; Copos de avena, sésamo,
- Desodorizante; Limón y café,
- Antibiotico; Propoleo
- Regenerador; Gel de Aloe muy triturado con la pasta de jabón, Flores y o aceite de caléndula
- Para hacer jabones más blandos añadir miel
- Para hacer jabones más duros añadir cera de abejas
- Cuando la mezcla va adquiriendo consistencia y visualmente queda homogénea justo antes de repartir en los moldes.
- Repartir en los moldes que hemos preparado. Para que después salga mejor de los moldes, en conveniente untar de aceite el molde o enharinar. Dejar reposar 24-48 horas
- Se sacan los jabones de los moldes. También se puede echar la mezcla en una bandeja grande. Se la deja reposar y antes de que se quede totalmente dura se corta en pastillas con un cuchillo.
- Una vez cortada, se dejan secar envueltos en toallas, papel de cocina, etc.. y se almacena durante un mes. Durante este tiempo es recomendable no tocar los jabones pues aún tienen cierta basicidad
1 comentarios:
Write comentariosSabes que la foto con los 4 jabones junto al saco de burlap es mía? La estás usando sin mi autorización, pertenece a Four Seasons Natural Soaps...
Reply